La Organización Mundial de la Salud (OMS) realiza diferentes advertencias respecto a productos farmacéuticos. En esta ocasión, hacemos referencia a una alerta de la OMS respecto a una vacuna contra la influenza falsificada que se ha identificado en la región de las Américas de la Organización.
Alerta sobre vacuna contra la influenza falsificada
La anteriormente mencionada alerta de la OMS sobre productos médicos y farmacéuticos refiere a tres lotes distintos de vacuna contra la influenza cuadrivalente Fluzone falsificada. Esta se ha identificado especialmente en México y ha sido notificada a la Organización Mundial de la Salud el 16 de octubre de 2020. Nombrada como Fluzone Quadrivalent, esta es una vacuna tetravalente inactivada para lograr la inmunización contra el virus de la influenza A y los subtipos B.
Explica la OMS que:
“Los productos sujetos a esta alerta se confirman como falsificados porque deliberadamente / fraudulentamente tergiversan su identidad, composición o fuente:
El fabricante genuino de Fluzone® Quadrivalent – Sanofi Pasteur – ha confirmado que no produjo ni distribuyó los productos sujetos a esta Alerta de Producto Médico de la OMS n ° 6/2020.
Y los datos variables (número de lote y fechas de caducidad) de estos productos no corresponden a sus registros de fabricación genuinos.
Genuine Fluzone® Quadrivalent aún no ha sido distribuido legítimamente en México por Sanofi Pasteur y no se espera que esté en el mercado antes de noviembre de 2020.
Este producto falsificado se identificó a nivel de paciente”.
Vigilancia y autoridades reguladoras
Ante un escenario como este, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha solicitado una mayor vigilancia por parte de las autoridades reguladoras dentro de las cadenas de suministro en los países y las regiones que puedan verse afectados por este tipo de productos falsificados. Al momento de describir dicha vigilancia, sostiene la OMS que la misma debe necesariamente incluir clínicas, hospitales, diversos centros de salud, distribuidores, espacios de venta mayorista, farmacias y todo tipo de proveedor que se dedique a la comercialización y distribución de productos médicos.
Con respecto a la población y el cuidado de su salud, la OMS manifiesta que:
“Todos los productos médicos deben obtenerse de proveedores autorizados / autorizados y fiables. La autenticidad y el estado físico de los productos deben comprobarse cuidadosamente. Busque el consejo de un profesional sanitario en caso de duda.
Si está en posesión de los productos falsificados anteriores, no los utilice.
Si ha utilizado estos productos falsificados, o ha sufrido una reacción / evento adverso después de haber utilizado estos productos, se le recomienda que busque atención médica inmediata de un profesional de la salud calificado y que informe el incidente a las Autoridades Reguladoras Nacionales / Centro Nacional de Farmacovigilancia”.
Conclusiones
La OMS trabaja para erradicar la presencia de productos médicos y farmacéuticos falsificados o de mala calidad. Por eso, recomienda a las autoridades sanitarias y reguladoras de los Estados nacionales que notifiquen de manera inmediata a la Organización Mundial de la Salud en caso de que estos productos falsificados puedan llegar a identificarse en sus territorios. Además, incita a que, si se tiene alguna información respecto a la fabricación y la distribución de estos productos, se realice una comunicación que lo informe.
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