Pese a la pandemia del nuevo coronavirus, existen distintas enfermedades que requieren de que se les siga prestando atención a nivel social y regulatorio. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha puesto, hacia fines del mes de enero, en marcha una nueva hoja de ruta respecto a las enfermedades tropicales que se encuentran desatendidas. Un plan que se destaca por su enfoque innovador, como así también por sus ambiciosos objetivos para combatir un total de 20 enfermedades que afectan, actualmente, a más de 1.000 millones de personas. La mayoría de estas, además, viviendo en situación de pobreza en sitios donde el acceso a servicios de salud de calidad y a agua potable es escaso.
En este aspecto, el Director General de la OMS, Ghebreyesus, sostuvo que:
“Para acabar con el azote de las enfermedades tropicales desatendidas, tenemos que cambiar con urgencia nuestra forma de actuar. Necesitamos intensificar nuestros esfuerzos y colaborar para encontrar nuevas formas de prevenir y tratar todas estas enfermedades y atender a todas las personas afectadas”.
¿Qué son las enfermedades tropicales?
Conocidas como enfermedades tropicales desatendidas, se trata de enfermedades que afectan a más de 1.000 millones de personas en el mundo. Son afecciones con repercusiones duraderas de carácter social, sanitario y económico en las personas y en las sociedades en general. Sus consecuencias pueden ir desde el dolor hasta la discapacidad.
Objetivos de la OMS contra las enfermedades tropicales
La nueva hoja de ruta planteada por la OMS desarrolla objetivos respecto a las enfermedades tropicales para el período 2021-2030. Su lema ha sido Poner fin a la desatención para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Algunos de estos objetivos destacados son: erradicar la dracunculosis y el pian, como así también reducir en un 90% las necesidades de tratamiento de las ETD.
Del mismo modo, el plan se propone agilizar las medidas programáticas necesarias y genera run nuevo impulso, a través de proponer acciones concretas mediante plataformas integradas de prestación de servicios que permitan un aumento en la cobertura y la rentabilidad de los programas.
Además de lo mencionado anteriormente, se pretende habilitar a las autoridades locales y nacionales para que puedan asumir más responsabilidad a la hora de aplicar medidas. En este sentido, la OMS explica que los objetivos fijados de cara al 2030 son:
“reducir en un 90% el número de personas que requieren tratamientos contra las ETD;
lograr que 100 países hayan eliminado, al menos, una ETD;
erradicar al menos dos de estas enfermedades; y
reducir en un 75% los años de vida ajustados en función de la discapacidad en relación con las ETD”.
Conclusiones
En la última década se han logrado importantes avances respecto a las enfermedades tropicales. Estos han posibilitado que 600 millones de personas dejen de correr riesgo de contraer dichas enfermedades. A la vez, 42 países y zonas han eliminado al menos una de estas enfermedades. Los programas han tratado a más de 1.000 millones de personas cada año a lo largo de cinco años consecutivos, de 2015 a 2019.
Comment here