Los medicamentos opioides son potentes para la reducción del dolor. Incluyen hidrocodona, oxicodona y morfina, entre otros. Tienen beneficios y riesgos que podrían llegar a ser graves. La FDA busca dar respuesta a una situación de riesgo, puesto que son muchas las personas en Estados Unidos que se han visto afectadas por los daños asociados al uso de estos medicamentos. Pese a los esfuerzos que se están llevando a cabo, la crisis de los medicamentos opioides es algo que no para de crecer.
Trabajo de la FDA para reducir la crisis de los medicamentos opioides
En la actualidad, una de las principales prioridades de la FDA tiene que ver con avanzar en los esfuerzos para poder abordar la crisis del uso indebido de los medicamentos opioides. A medida que el tiempo pasa, los opioides están cobrando vida a un ritmo muy veloz. Se enfrenta en la actualidad una sobredosis de opioides recetados, que están llevando a cabo una reducción en la esperanza de vida en Estados Unidos.
Uno de los objetivos principales de la FDA en la actualidad es reducir la cantidad de estadounidenses que son adictos a los medicamentos opioides. En este sentido, promover una reducción en la tasa de nuevas adicciones. Esto puede lograrse asegurándose de que solo se receten los opioides a los pacientes en los que estos pueden indicarse debidamente.
La FDA explica que:
“Dada la magnitud de la crisis de los opioides, con millones de estadounidenses ya afectados, la prevención no es suficiente. Debemos hacer todo lo posible para abordar el costo humano causado por el trastorno por consumo de opioides y ayudar a quienes padecen adicción ampliando el acceso a tratamientos que salvan vidas.”
Nuevos tratamientos del dolor
La FDA se propone generar medidas para ayudar a las personas que sufren de dolores agudos y crónicos y que necesitan acceso a medicamentos. Ello, para generar mejores alternativas de tratamiento donde no se dependa de los medicamentos opioides. Se apunta a generar una transición entre el mercado actual dominado por los medicamentos opioides a uno en que la mayor parte de los opioides tienen propiedades disuasorias del abuso. Lo que se busca con ello es dificultar que las personas que manipulen este medicamento puedan abusar del mismo.
Sostiene la FDA que:
“La FDA desempeña un papel de aplicación cuando se trata del mercado ilícito de opioides desviados y drogas ilegales. Uno de esos roles es colaborar con Aduanas y Protección Fronteriza en el trabajo de interdicción de drogas que se envían por correo. La agencia ha recibido nuevos fondos para procesar medicamentos y otros artículos importados u ofrecidos para su importación a través de las instalaciones de correo internacional. Muchas de las drogas ilícitas que ingresan a los Estados Unidos, incluidos los productos mezclados con dosis letales de fentanilo, se compran en línea y se envían por correo. Aunque la venta de opioides recetados sin una receta válida es ilegal, la FDA sigue viendo estos productos en los paquetes que inspeccionamos.
Además, parte de nuestro trabajo continuo es garantizar que las decisiones de aprobación y eliminación de medicamentos se tomen dentro de un marco de beneficio / riesgo que evalúe no solo los resultados de los opioides cuando se usan de manera prescrita, sino también los efectos en la salud pública del uso inadecuado de estos medicamentos. Estamos reevaluando continuamente la seguridad de los productos opioides aprobados en función de los datos posteriores a la comercialización que la FDA ha solicitado a los patrocinadores y de fuentes adicionales de información como parte de nuestra vigilancia de seguridad.”
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