Recientemente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha agradecido los primeros ensayos clínicos de la industria farmacéutica del Reino Unido con respecto al uso de la dexametasona para covid-19. Estos estudios preliminares han demostrado que la dexametasona puede salvar vidas. Principalmente, en pacientes que se encuentran cursando la enfermedad de manera grave.
Los resultados preliminares de este tratamiento dan cuenta de que se ha reducido la mortalidad en un tercio para los pacientes con ventilador. En los pacientes que solamente requieren oxígeno, la mortalidad se ha reducido en un quinto.
¿Qué es la dexametasona y cómo funciona?
La dexametasona es un corticosteroide. Se utiliza en una amplia gama de condiciones de salud, particularmente por sus efectos inmunosupresores y antiinflamatorios. Para los resultados anteriormente mencionados, se ha probado en pacientes hospitalizados positivos de covid-19 en recuperación. Como consecuencia de ello, se ha descubierto que tiene importantes beneficios para los pacientes en estado crítico por covid.19.
Los pacientes seleccionados para el tratamiento fueron asignados al azar. Este medicamento fue administrado como preparación oral o intravenosa. La dosis fue de 6 mg, tomada una vez al día a lo largo de diez días. En lo que respecta a las mujeres cursando embarazos o período de lactancia, las pacientes se asignaron al azar a prednisolana, que es un corticosteroide más leve. La administración fue por vía oral de 40 mg.
El reconocimiento de la dexametasona por la OMS
Si bien el uso de la dexametasona para covid-19 positivos es algo que se encuentra aún en estudio y evaluación, la dexametasona ha permanecido en la Lista Modelo de Medicamentos Esenciales desde el año 1977 por parte de la OMS. A partir del año 2013, este medicamento en formulación inyectable fue indicado para el síndrome de dificultad respiratoria en los niños recién nacidos.
Las condiciones de salud para las que la dexametasona y la prednisolana eran ya incluidas en la EML en función de las indicaciones que mencionamos a continuación:
- En protocolos de tratamiento para algunos cánceres del tejido sanguíneo
- En náuseas y vómitos
- En dolor y edema por malignidad en casos de cuidados paliativos
- En condiciones alérgicas o de hipersensibilidad
Situación de la dexametasona para covid-19
En lo que respecta a la utilización de este medicamento para los pacientes de covid-19 en estado crítico, el Director General de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, anunció que:
«Este es el primer tratamiento que se ha demostrado que reduce la mortalidad en pacientes con COVID-19 que requieren oxígeno o asistencia respiratoria (…) Esta es una gran noticia y felicito al Gobierno del Reino Unido, la Universidad de Oxford y los numerosos hospitales y pacientes en el Reino Unido que han contribuido a este avance científico que salva vidas».
La dexametasona es un medicamento que no está patentado. Farmacéuticas comercializan en distintos tipos de formulaciones desde hace tiempo. Suele estar disponible en la mayor parte de los países, habiendo múltiples fabricantes del mismo. La OMS ha precalificado a un fabricante que es Kern Pharma de España.
A lo largo de los últimos años, se han presentado informes en los que se da cuenta de la escasez de este producto en muchos casos. En este sentido, de cara a la pandemia del nuevo coronavirus, se debe comprender cuál es el volumen necesario de producción para covid-19 y cuál es la capacidad de fabricación actual de esta fórmula. Ello, para poder asegurar que todos los pacientes de todas partes del mundo puedan acceder a esta terapia.
Los mencionados hallazgos del uso de dexametasona para covid-19 refuerzan la importancia de los ensayos de control aleatorio, en términos de la OMS. Dados estos anuncios, la Organización Mundial de la Salud ha asegurado que continuará trabajando para desarrollar más terapias y vacunas para dar una respuesta a la pandemia del covid-19.
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