“Esta enfermedad nos va a matar de hambre, dijo Dieufete Lebien, de 57 años, obrero de la construcción ahora desempleado en Haití”. “Yadira Montenegro, de 38 años tiene 3 hijos, vive en Bogotá, hace poco perdió su empleo, ahora sólo come una vez al día”. «En Medellín, personas con algo de dinero prefieren comprar comida que tapabocas».
Hambre y Covid 19. Perspectivas de la agroindustria alimentaria
En 2018, según el informe Global Hunger Index (GHI), 822 millones de personas sufrían de hambre, lo cual era una emergencia antes de la pandemia, que trae consecuencias demoledoras en términos alimentarios.
Un informe de la FAO dice que las medidas para frenar el virus incrementarán hambre y pobreza en América Latina y el Caribe. Un tercio de la población se encontraba en «inseguridad alimentaria» antes de la aparición del virus.
¿Cómo afectará covid 19 a la población más empobrecida?
La desnutrición debilita el sistema inmune de las personas. Los niños enfrentan consecuencias cognitivas y de salud a largo plazo. Incluso las personas que no contraen el virus están afectadas por la pérdida de trabajo y de ingresos.
La ONU advirtió que mientras en 2019 el hambre afectó a 3,4 millones de personas, el número podría ser más de cuatro veces mayor este año en las regiones más vulnerables del mundo.
Por la pandemia 46 millones podrían sufrir situaciones de pobreza o de pobreza extrema. En Latinoamericana y el Caribe, la CEPAL estima que más del 47% de la población no tiene acceso a la protección social.
Así mismo señala que en 2020 la cifra de personas pobres aumentaría de 186 a 220 millones..
En África, regiones como el Sahel o el Cuerno de África ya están en grave situación por hambre. Las medidas de confinamiento en la India han ocasionado un éxodo de trabajadores hacia sus comunidades de origen, huyendo por el hambre.
Las cuarentenas destruyen puestos de trabajo
Así mismo estas medidas impiden a millones de personas salir a trabajar para procurarse el sustento básico. El confinamiento destruye puestos de trabajo y afecta la economía. El Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas se refiere a la crisis como “la pandemia del hambre”.
Alrededor de 265 millones de personas en países de ingreso medio y bajo sufrirán inseguridad alimentaria aguda a finales de 2020. La mayoría de quienes la sufrieron, en 2019 se encontraban en países afectados por conflictos (77 millones), cambio climático (34 millones) y crisis económicas (24 millones). 10 países padecen las peores crisis: Yemen, República Democrática del Congo, Afganistán, Venezuela, Etiopía, Sudán del Sur, Siria, Sudán, Nigeria y Haití.
Sudán del Sur tenía el 61% de su población en un estado de crisis alimentaria en 2019. Otros seis países también tenían al menos el 35% de su población en este estado: Sudán, Yemen, República Centroafricana, Zimbabwe , Afganistán, Siria y Haití.
El Economista Jefe de WFP afirmó que covid-19 es catastrófico debido a que el confinamiento y la recesión económica diezma los ahorros y golpea a quienes solo pueden comer si ganan un salario. Según la OIT, el 60% de los trabajadores del mundo trabajan en la economía informal, sin protección social. Muchos de ellos dedican una importante parte de sus ingresos a la alimentación básica familiar.
Hambre y Covid 19. Perspectivas de la agroindustria alimentaria
Aunque en el 2020 los suministros de grano básico están asegurados, la FAO identificó problemas en la demanda por la reducción de la capacidad adquisitiva, y en la oferta por sustracción de la mano de obra, disrupción de las cadenas de distribución y limitaciones para el acceso a capital
Además de la posible alteración de los precios debido a la interrupción de los flujos de importación y a la disminución de ingresos por la reducción de los valores de exportación.
Las acciones relacionadas con la alimentación y la agricultura son actividades de interés público que obtienen atención prioritaria por parte de los órganos estatales, lo cual está generando asignación de fondos de capital para atender la emergencia.
De acuerdo con lo anterior hay múltiples oportunidades de mercado para las industrias agropecuarias y transformadoras de alimentos.
Es conveniente considerar situaciones específicas con el fin de aprovechar las oportunidades en forma racional con el fin de adelantar acciones congruentes hacia el largo plazo, que garanticen la rentabilidad y aporten al desequilibrio alimentario, con base en los Objetivos de Desarrollo Sostenible – ODS de las empresas.
Frente a esta perspectiva es importante definir la Propuesta de Valor de la oferta, para consumo humano o animal, y la posición en la cadena de valor: insumo – producción (cultivo) – transporte – almacenamiento – procesamiento – conservación – distribución – servicio, así como la contribución a los objetivos de sostenibilidad de la empresa y de sustentabilidad del planeta.
Fuentes: Reuters, Infobae, Ayuda en Acción, PMA – UN, WFP, AFP, France 24, Wikipedia
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